Fiorella Retiz, la reportera que estuvo en el centro de la polémica tras protagonizar un ampay con el conductor Aldo Miyashiro, ha roto su silencio respecto al fin del matrimonio de Miyashiro con Érika Villalobos. La comunicadora, ahora parte del programa ‘La casa de Magaly’, ha negado rotundamente ser la responsable de la separación de la pareja. A pesar de sus explosivas confesiones sobre su relación con Miyashiro, Retiz asegura que la relación entre el conductor y Villalobos ya estaba deteriorada antes de que ella apareciera en escena.
En una entrevista con el diario Trome, Retiz afirmó: «Mira, no creo que haya destruido algo que ya estaba destruido, por eso te digo que en las redes sociales es fácil ser juez, pero no me siento identificada con eso porque sé la verdad». Aunque asumió cierta responsabilidad en el asunto, la periodista deportiva expresó que el dolor persiste y que ha enfrentado crisis de ansiedad desde entonces.
Además, Fiorella Retiz denunció que el ampay la dejó sin trabajo, a diferencia de Aldo Miyashiro, quien no enfrentó las mismas sanciones laborales. Antes del escándalo, ella tenía siete trabajos y trabajaba incluso los fines de semana, pero perdió todo debido a la controversia, lo que considera injusto y relaciona con discriminación de género, dado que no tenía la misma trayectoria que su excompañero de televisión.